"El Ejecutivo del Estado moderno no es más que un Comité que administra los negocios comunes de toda la burguesía" (K. Marx y F. Engels, Manifiesto del Partido Comunista).

miércoles, 26 de mayo de 2010

The Queen

         El post sobre el uso de la violencia es cuento largo... Hay que ir preparando las cosas y las mentes. Y que mejor que empezar por un entrenamiento "suave": Fijémonos en la ceremonia de ayer en el Palacio de Westminster, Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del Norte. Más allá de carrozas y colorines y, salvando el hecho de que la ceremonia de "Apertura de Cortes por la Reina" es un medio invento turístico de Eduardo VII, tres hechos (simplificadamente contados, el que quiera un doctorado protocolario e histórico que se vaya a Oxford o aquí: State Opening of Parliament) merecen la atención: 

           Primero.- El discurso se realiza en la Cámara de los lores, porque ningún Rey/Reina "pisa por" la Casa de los Comunes desde que en 1.642, Carlos I y sus hombres violaron el recinto para detener a cinco diputados "sediciosos": que se diera hoy un garbeo el monarca por ahí sería considerado una provocación. 

          Segundo.- La Reina da la orden a los comunes para que acudan a su presencia: envía a un emisario (“el Black Rod”, el "Tío la Vara" más o menos), al que los Comunes le dan literalmente “con la puerta en las narices”; aunque más tarde le abren, cuando “tira de vara”. Los comunes hacen lo que “les sale de los huevos”: van, no van, la mandan a tomar vientos (de hecho es tradición que los comunes republicanos, que los hay, hagan rechazo ostensible de la “invitación"). En definitiva: el Rey ordena y el pueblo resiste. 

           Tercero.- Mientras su Graciosa Majestad está "en territorio hostil", para garantizar que su Real Cabeza no va a sufrir una dramática separación de su cuerpo, aparte de rodearse de un pelotón de sus "beefeaters" (los únicos perros humanos que en tiempos pasados les echaban de comer carne), exige que un diputado sea encerrado en Buckingham Palace como rehén (“hostage MP”, para mejor asegurar su integridad personal(*). 

           ¿Qué lecciones sacamos de esto?¿Qué los ingleses son los reyes mundiales de la payasada teatral? Nada de eso: lo que sucede es que en los países que han conquistado la democracia constitucional, sigue presente la idea de conquista frente al enemigo (en este caso la monarquía absoluta). En los países que nos hemos adherido a esos principios "por moda", o para que nos dejaran entrar en el Mercado Común y gracias al pasteleo de la transición esto se ha convertido en una "casa de coleguitas" en las que el Rey resulta ser el más campechano de todas las fiestas.

            Otro tanto sucede con las conquistas sociales, de las que tanto se habla en este blog: se conquistan, no nos las regalan. El capitalista, el rico, el poderoso, gratis “no da ni la hora”: hay que "luchar" por las mejoras, y hay que seguir luchando porque no se pierdan... y hay que ir “a por más”. Y esas luchas son dolorosas. En el mismo Reino Unido, donde ayer gracias a Al Jazzira pudimos ver la ceremonia, en el siglo XIX miles de obreros se partían la cara y se dejaban la vida en revoluciones "pacíficas" como la "chartista" (nada que ver con la bolsa, queridos seguidores neoliberales). 

            Eso en el país más tradicionalista y conservador del mundo. ¿Y en el nuestro?: Viendo a Nadal en otra cadena.

(*) Sugiero a los Comunes republicanos que dejen de rehén a una "pajín" cualquiera y luego corten la cabeza a la Reina: así matan dos pájaros de un tiro.

19 comentarios:

  1. Chapeau, como siempre. Adoro a la monarquía británica, sobre todo en tiempos de Lord Protector, aquel gigante que fue capaz de entrar en su propio parlamento republicano e ir diciendo: "¡tu, idota, fuera! ¡Tú, imbecil, fuera! Si, la libertad no se solicita con una instancia por triplicado, se conquista, aun siento arcadas al recordar al vulcaniano cuando fue al parlamento otorgado español a pedir por favor la co soberanía para Euzkadi, solo un alelado como el y los que le sostenían podía pensar que se la iban a dar por las buenas. Decía Mao que los europeos se escandalizaban como damiselas al ver la violencia de las revoluciones de otros pueblos y olvidaban lo sangrientas que habían sido las suyas. No me resisto a reproducir sus poéticas palabras:

    “Hacer la Revolución no es ofrecer un banquete, ni escribir una obra, ni pintar un cuadro o hacer un bordado, no puede ser tan elegante, tan pausada y fina, tan apacible, amable, cortes, moderada y magnánima. Una Revolución es una insurrección, es un acto de violencia mediante el cual una clase derrota a otra.”

    El Libro Rojo

    ResponderEliminar
  2. Fantástico, esos detalles son tremendamente interesantes e ilustrativos... de lo que es y lo que puede ser.

    ResponderEliminar
  3. En España, viendo a Nadal, ¿todos? ¡No! En la "aldea" de Badajoz la gente se dedicaba a guardar largas colas para coger alguna de las 3.000 banderitas (¿a costa de alguna pensión o algún funcionario mileurista?) con las que recibir a los Reyes el próximo Día de Exaltación de la Violencia Institucional. Dice la noticia: "Entre los pocos jóvenes de la cola estaba María de Gracia Galán, contenta por esta celebración 'pues está bien que salgamos en las noticias por algo bueno'. Y también el sacerdote don Apolonio se hizo con una de las enseñas, 'para llevarla en la mano' porque de su balcón ya cuelga otra mucho mayor." Y mientras, el concejal del PSE apaleado en comisaría por pedir la República. Y es que el Régimen no sólo usa violencia institucional, también física.

    ResponderEliminar
  4. Creo que nada me aterra más que el futuro de mis dos hijos pase por la violencia. Que tengan que vivir en un lugar (como tantos en este mundo) donde sólo haciendo actos terribles, uno pueda sobrevivir. Detesto la violencia en todas sus formas. Lo más cerca que he estado de ella ha sido asistir a la matanza del cerdo. Lo oigo chillar mientras se desangra y he removido su sangre todavía caliente para que no se coagulara. No es nada lo sé, pero muchos se harían vegetarianos si tuvieran que matar y descuartizar ellos mismos al animal, no quiero ni imaginar el grado de vileza que uno tiene que alcanzar para hacer eso con un humano sin volverse loco. Aunque no se confundan, mi intelecto es capaz de imaginar una situación en la que mataría, por supuesto. No he llegado aún a tal grado de hipocresía. Lo que quedara después de mí, sin embargo, ya no lo sé.

    Me aterra pensar que hay una relación entre energía consumida per capita y democracia. Dicen que hay un EROI mínimo para una sociedad más compleja que la cazadora-recolectora. ¿Lo habrá también para la democracia?

    Hemos tenido suerte si piensan globalmente. Hemos nacido en el barrio “guay” del mundo y aunque nuestro oficio aquí sea de los mal remunerados, hemos consumido cantidades ingentes de plusvalía generada por otros a miles de kilómetros de distancia. Empiezo a intuir que hemos perdido una oportunidad de oro (negro) de hacer algo que compense la pena. El tiempo se acaba y no sé como escaparemos de la maldición de Bertolt Brecht.

    “Sólo la violencia ayuda allí en donde la violencia reina”

    Otro “bonito bucle” del que es difícil escapar.

    ResponderEliminar
  5. Hola,

    Leer este post me hace pensar en las conquistas sociales que no han tenido porque representar el uso explícito de la violencia física. A modo de ejemplo tenemos el caso paradigmático, y que viene como anillo al dedo, de la independencia India del imperio británico inducida por Mohandas Gandhi a principios del s. XX. Es de todos conocido que usando métodos no violentos como la huelgas de hambre y otros se provocaron auténticas movilizaciones ciudadanas como la Marcha de la Sal en 1930. Gandhi no es ni mucho menos el único ejemplo de revolucionario no violento. Es también relevante el caso del pastor estadounidense Martin Luther King el cual mediante los métodos de la desobediencia civil y otra vez la no violencia, llevó a cabo una notable lucha por los derechos civiles de los afroamericanos.

    Por lo tanto opino que efectivamente se debe luchar por las mejoras y para que no se pierdan, añadiendo que si puede ser de manera no violenta, pues mucho mejor.

    Cordialmente

    ResponderEliminar
  6. ¿Porque siempre cuando se habla de violencia revolucionaria (la otra la sufrimos todos los días y nadie la menciona) sale a relucir el tío de los pañales? A mi es una figura que me da especial grima, no por lo que el hizo en si (crear una neo colonia británica donde la oligarquía es reina) si no porque siempre se utiliza como ariete contra los "violentos". Lo del King, es ya de risa, ¿que consiguió este manso? ¿Una republica popular negra? la situación general de la raza negra en USA apenas ha variado socialmente por muchos actores negros que salgan en TV. Para mí, todos estos tibios no se diferencian en nada del cura Gapon.

    ResponderEliminar
  7. Hasta aquí todo lo que has comentado en el blog fue muy interesante, incluidos estos detalles culturales británicos, aunque a día de hoy sean más chascarrillos que realidades ya que el respeto a la monarquía que hay en Reino Unido (ojo al nombrecito que usan como país) está muy por encima del nuestro, y recuerdo que soy republicano (de los que quieren una República como sistema político, no abanderado tricolor).

    A partir de aquí, si derivamos a la violencia ya no me va a parecer tan interesante y para este viaje no hacían falta estas alforjas.

    Cierto es que ya en alguna ocasión Agustín ha comentado ser partidario de la pica y el barreno, aunque creí entender que su barreno era figurado, de alguna manera, este blog, el adoctrinamiento de sus alumnos y otro tipo de acciones similares en contraposición a los otros que a eso, según Agustín, lo llaman "goma2 eco" o derivados. Ya no lo tengo tan claro.

    En el ciudadano Zhu-De no tengo demasiada esperanza pues también ha comentado en otra ocasión, literalmente, "me volvere 'democrata' cuando vea actuar a alguna guerrilla 'democrata'", por que deduzco que, en realidad, es un guerrillero y el color es rojo maoista como podría haber sido el primero de la lista de las juventudes hitlerianas si hubiese naZido en la Alemania de 1920 o pilotado el Dragon Rapide si le hubiese pillado en Canarias en el 36. La extraordinaria lírica poética de Mao con la que nos deleita deja claro que él sólo quiere caña y derrotar a otros y en ello debe pensar que estará su realización personal.

    Pero la superación (hegeliana) del capitalismo no puede venir por una revolución violenta sino por una concienciación social a través de vías no violentas, que no dejen vencedores y vencidos, ni opresores y oprimidos.

    Iba a mencionar los paradigmáticos casos de Ghandi y M.L.King pero ya lo ha hecho extraordinariamente Roger Olivella y lo suscribo plenamente.

    La diferencia entre este sistema capitalista y el sistema que conseguiríais con la revolución violenta es, simplemente el hecho de que yo no podría estar aquí expresando libremente mi opinión como sí podéis hacer vosotros en este sistema que tanto odiáis. Es más, el propio sistema gracias a todos sus defectos pone en vuestra mano las armas para derrotarlo, las mismas armas del capitalismo pueden usarse contra él como ha demostrado George Soros a quien se puede entender o criticar, pero lo relevante es que ha demostrado que hay una vía para resolver los problemas del capitalismo desde el capitalismo (ahora podéis ponerle a caldo, pero sabed que también le odian en el sector liberal).

    Al igual que David Pi, puedo imaginarme situaciones en las que yo mismo podría ejercer actos violentos pero después ya no sería "yo mismo" y, en cualquier caso, dudo que estemos en esa situación, es más, dudo incluso que el problema sea el que planteáis sino uno más serio y simple: sostenibilidad. Una revolución sobre la premisa de lucha de clases sólo nos hará perder más tiempo y recursos. Espero, por mi hijo, por la hija de Antonio, por los hijos de David y por los de todos los demás habitantes del planeta, que sepamos encontrar otro camino.

    Para terminar, simplemente decir que tiemblo cada vez que alguien habla de "conquistar la libertad", concepto tan manido que hasta Franco liberó al pueblo español y acabó metiendo lo de "libre" en su eslogan. Cuántas tropelías...

    ResponderEliminar
  8. "La diferencia entre este sistema capitalista y el sistema que conseguiríais con la revolución violenta es, simplemente el hecho de que yo no podría estar aquí expresando libremente mi opinión"

    Ni falta puñetera que haria, en nuestro sistema de "revolucion violenta" los elementos anti sociales solo estarian destinados a "trabajos forestales" en la taiga...

    ResponderEliminar
  9. @zhu-de, una pena, como ya dije no me voy a meter en más discusiones bilaterales contigo.

    Simplemente decir que este elemento anti-social está de acuerdo en que en el sistema actual tú tengas educación gratis, sanidad gratis y todo tipo de prestaciones sociales y la libertad de elegir si te prefieres ser leñador, ingeniero, médico y hasta empresario.

    ResponderEliminar
  10. "Simplemente decir que este elemento anti-social está de acuerdo en que en el sistema actual tú tengas educación gratis, sanidad gratis y todo tipo de prestaciones sociales y la libertad de elegir si te prefieres ser leñador, ingeniero, médico y hasta empresario."

    Claro, siempre y cuando lo permita la coyuntura y no se tengan que efectuar "recortes" para salvar a vuestros amigos, los bancos ¿verdad?

    ResponderEliminar
  11. @zhu-de: "Para mí, todos estos tibios no se diferencian en nada del cura Gapon."

    Gandhi y King tibios. Me pregunto que tipo de tibieza tuvieron estos dos personajes considerando el pequeño detalle que dieron la vida por sus ideales.

    La idea subyacente a este comentario es que los no-violentos son tibios y los violentos tienen un par bien puestos. Nada más alejado de la realidad. Qué es más cobarde: dar lo más preciado que tienes que es tu vida por los propios ideales o disparar un misil teledirigido con cabeza termonuclear guiado por láser desde 10.000 km de distancia? De acuerdo, es un ejemplo extremo pero creo que se entiende lo que quiero decir.

    Dar lo mas preciado que tiene uno mismo, su vida, por aquello que piensa que es cierto y verdadero. Ahí está el verdadero heroísmo. Y hasta que esto no se entienda de una puñetera vez nos estaremos dando de ostias hasta el día que todos nos vayamos a tomar por culo.

    ResponderEliminar
  12. "el pequeño detalle que dieron la vida por sus ideales." naturalmente, en vez de que sus enemigos dieran su vida por los suyos, un detalle sin importancia, el resultado está a la vista, el de los pañales en vez de conseguir una autentica independencia de su nacion, lo unico que consiguio fue una pseudo colonia donde las diferencias de clases no se movieron un apice. En cuanto al reverendo negro, mejor ni hablamos, sirvio como obstaculo a otros mas decididos (Malcom X, Carmichael) total para ser asesinado sin conseguir su objetivo, una nacion negra en USA. Los martires solo sirven para que les hagan bonitos alteres y para que el enemigo los utilice como espantajos.

    ResponderEliminar
  13. Roger, si revisas la correspondencia epistolar del camarada Zhu-De verás que su concepto de tensión dialéctica se basa en que él tiene la razón; esencialmente es un faro que nos ilumina en nuestra oscuridad. Sometido por el peso de su invencible certeza, no tiene caso discutirle nada (es como intentar parar un río con las manos); hay únicamente que leerle y paladear lentamente los densos grumos de la verdad de su discurso. Por lo demás, es un chico muy simpático cuando se le conoce a fondo.

    Salu2,

    Antonio

    ResponderEliminar
  14. Que curioso Antonio, siempre respondes a mis argumentos con descalificaciones ad nominem, por que sera, eso si, muy educada y condescendientemente, incluso pareces conocerme personalmente, creo que mis argumentos te sacan de quicio, cosa que me congratuuula...

    ResponderEliminar
  15. Qué tal, Zhu-De:

    Supongo que por "descalificaciones ad nominem" quieres decir "argumentos ad hominem". Que no, hombre, que no, que no tengo ningún interés es descalificarte yo; que te digo que me caes bien y lo digo sin ironía, créeme.

    Educado intento serlo (aunque alguna vez uno pierde los estribos, que se lo digan a Javier Bur), y condescendiente... no sé, quizá, aunque eso no es positivo, porque implica un sentimiento implícito de superioridad, superioridad que sé bien que no tengo. Intentaré corregirme.

    No nos conocemos que yo sepa, pero sería más fácil que tú lo sepas porque yo publicito todos los datos de mi identidad.

    No, hombre, tus argumentos no me sacan de quicio; me enternecen, más bien...

    Venga, un abrazote. Salu2,

    Antonio

    ResponderEliminar
  16. ¡Se nos va de las manos! Como veis la "política" ("policy") de este blog es la siguiente: no se moderan ni censuran comentarios (hay por ahí algún spam, incluso) y, a diferencia de mi hermano, tampoco contesto cada contestación. Todas me parecen interesantes porque aportan distintos puntos de vista, que, lo mejor de todo es que no son coincidentes. De muchas cosas que cuento, ni yo sé cuál es la solución o lo "correcto", pero si las escribo es para generar debate o reflexión (lo que venga primero). Reconozco que este post llevaba "veneno amasado" pues plantea el uso de la "fuerza" (si no gusta la palabra violencia) como base de ciertas conquistas sociales: no es algo que nos guste o disguste, es algo que siempre está ahí, como las guerras: forma parte de la Humanidad. Para otros posts he dejado sabrosas frases de San Agustín sobre el orden establecido, que repetidas hoy pondrían en marcha a la misma Audiencia Nacional. También hablaré de la otra "violencia" la que se ejerce silenciosamente día a día en sociedades democráticas: Ghandi, que se ha citado aquí fue encarcelado varias veces como resultado de su "método pacífico" del que habría mucho que decir, pues algunas de sus tácticas de desobediencia civil trasplantadas al norte de este país, se castigan con la cárcel.¿Y cómo fue castigado un acto pacífico como levantar un puño enguantado en el podio de unos Juegos Olímpicos?¿Como se castigó a Turing por ser homosexual (en 1.952 no en la Edad Media)?¿Cuánto desvían el tiro los paramilitares colombianos para matar políticos y sindicalistas? Y así, suma y sigue. Pero de eso no hablaremos hoy, lo haré mañaaaaaana...

    ResponderEliminar
  17. La fuerza está presente en nuestro sistema democrático, la ejerce el Estado en monopolio, para, por ejemplo, exigirme los impuestos o impedir que circule a 180 km por hora como me gustaría. Y creo que ahí es donde debe estar, monopolio del Estado (veis?, no todos los monopolios son malos).

    Por cierto, yo nunca he tenido a suerte de que un trabajador prestase sus servicios gratuitamente, o me hiciera horas extra por la cara. Me parece a mi que se parece mucho un trabajador a un capitalista, no les gusta regalar las cosas. Habrá que proceder como con los capitalistas y "luchar", es decir obligar a los trabajadores a que trabajen por la cara, a la fuerza.

    ¡En fin!. Que no, que lo que hay que crear es las condiciones para que se produzca el libre intercambio de bienes y servicios de la manera más racional posible (lo que implica en ausencia de violencia)

    ResponderEliminar
  18. Hola, Hank:

    Estoy de acuerdo en que lo ideal es la ausencia de violencia (para el intercambio de bienes y servicios también, pero sobre todo para vivir, simplemente). Pero, ¿qué pasa cuando el sistema económico-social se vuelve disfuncional y atenta contra los principios implícitamente aceptados sobre los que se basa la convivencia social? ¿Qué pasa cuándo en medio de esta disfunción el Estado usa ese monopolio de la violencia de manera errónea? (e.g., qué pasa cuando un concejal se atreve a toser un poco más fuerte sobre la conveniencia de la realeza y como ya no está el horno para bollos se le atiza con toda la contundencia de la ley). Pues que tenemos un problema. Que nadie se equivoque, me repugna y me preocupa la violencia, el caos, la revuelta... Lo que me gustaría saber es cómo parar su estallido. Mediante más represión (perdón, aplicación rigurosa y correcta de la ley) seguro es que no (y la historia nos da sobrados y excesivos ejemplos de ello).

    Salu2,

    Antonio

    ResponderEliminar
  19. Yo creo que las cosas no están tan mal como las pintas, compartiendo el fondo de lo que dices.

    No creo que al concejal ese le pase nada, por mi tonto que me parezca el gesto (y no por la critica de la monarquia como sistema en si, que me parece no solo legítima sino bastante razonable).

    Hay mecanismos de control del Estado. Mecanismos que, por otra parte y a mi juicio, se están manifestando completamente inadecuados e insuficientes, porque creo que en éstos tiempos hay una enorme mayoria de ciudadanos que no nos vemos representados por la "clase politica*" que tenemos y vemos que no hay manera de cambiar las cosas.

    En fin, yo creo que hay que hacer una "revolución" en la forma de participar del ciudadano en la cosa pública: listas abiertas, funcionamiento más abierto de los partidos "por ley", participación directa del ciudadano en determinadas decisiones utilizando la tecnología disponible, etc. etc. etc. Como siempre: + LIBERTAD

    Pero una revolución con forcas y cuchillos de cocina, no va conmigo.

    *Por llamarlo de alguna manera, no me gusta el rollo ese de las clases

    ResponderEliminar