"El Ejecutivo del Estado moderno no es más que un Comité que administra los negocios comunes de toda la burguesía" (K. Marx y F. Engels, Manifiesto del Partido Comunista).

domingo, 23 de mayo de 2010

Citizen K. y los fallos de información. Episodio 6.

          K. coge un yogur de la encimera de lácteos del Carrefour. Lo mira y lo remira: trata de leer la letra pequeña: leche, suero, fermentos lácteos, E nosecuantos, nosequeviene luego... imposible de leer; la  incipiente presbicia le juega una mala pasada. Lo posa(*), coge otro y repite el proceso: lo mismo; cada vez hacen las letras más pequeñas.

         A K.  Le preocupa el “asunto del papeo”, como diría aquel grupo musical cuyo nombre no escribo para que no me lo tengan que censurar.  Quiere comer sano, tiene miedo a todas esas cosas que echan en la comida, no porque envenenen a los demás o degraden al medio ambiente. No, lo que le preocupa es que le envenenen a él y a los suyos: K. Además de liberal, conservador, pijo, imbécil, urbanita... y todo lo que hemos visto hasta ahora, es, además, “ecoegoísta”.

          Al final K. Opta por su plan B: "me llevo los de Pascual, o los de la Lechera, o los de alguna marca “de confianza”: esos tienen que ser buenos a la fuerza, y asunto concluido". Si acaso “carga” con uno o dos de esos que parecen “supermegaecológicos” porque vienen en “tarrina” (como él lo pronuncia) de barro y llevan una etiqueta “como muy artesanal”: los fabrica la cooperativa “Nuestra Señora de Garoña” de Burgos: esos sí que tienen que ser naturales.

              K. llena el carro, paga en caja tras una larga cola, mete la compra en el coche, y deja el euro del carro al gorrilla de los carros: Carrefour debería hacerles un contrato laboral, ya que trabajan dentro de sus instalaciones. ¡En fin! Dos horas y media después de salir de casa para hacer la compra, se dispone a arrancar su BMW, de vuelta a su hogar: gira la llave y ¡nada! Otra vez, con el mismo resultado. Tras un ratito se da cuenta de que el coche está averiado. Su admiración por los alemanes desciende varios grados en su escala de lacayo de los poderosos. Llama a la grúa, se llevan el coche. ¡Un día horroroso!

           Al cabo de unos días se acerca al taller: la avería del coche no tiene arreglo, entre otras cosas porque el motor estaba hecho polvo. Y eso que hacía sólo dos meses que se lo había comprado a un amigo suyo de esos que traen coches de Alemania, que son una maravilla. ¡Ver para creer!

           Ciudadano K. Sigue pensando que, en la economía de mercado de competencia perfecta en el que él se cree que vive, los demandantes pueden, si quieren, tener toda la información disponible de los productos,  de forma que pueda elegir. Pero los acontecimientos de estos días le hacen dudar.

          - “Efectivamente”, le dice su economista de la guarda, el que se le aparece por las noches, “la idea de que en el mercado todos los agentes, y especialmente los más débiles, cuentan con toda la información posible, es algo irrisorio. Quizá cuando se intercambiaban ovejas y lechugas pudiera ser, pero hoy en día...

            - “Pero hay medios, prensa, organizaciones de consumidores, internet... Yo, por ejemplo siempre leo "Ciudadano", y estoy pendiente de todas estas cosas, y al final...

          -“Al final, idiota mío, no sirve de nada. Los oferentes cuentan con dos armas para que tú, consumidor no te enteres “de la misa la media”: en primer lugar la complejidad de los procesos productivos, muchos de los cuáles además son secreto industrial. Que el Estado controlara eso es imposible pues habría que poner un equipo de funcionarios: ingenieros, farmacéuticos, biólogos, veterinarios... en cada una de las empresas. En segundo lugar tienen la publicidad...

            -”¡Quieto, por ahí no paso! La publicidad es para los tontos, los que no se informan, los que se dejan engañar!¡No para mí, desde luego!

             - “¿Tú crees? Haz examen de conciencia de lo que ha pasado estos días: en primer lugar has ido a comprar a Carrefour porque era más barato, ¿y es más barato? Añade al precio de los productos en oferta (y a los demás que te has llevado cuándo los has visto y te has dado cuenta de que te hacían falta), el coste de transporte hasta tu casa y las horas perdidas en las que has estado haciendo de transportista... ¡ah! ¡Y también el euro que le has dado al gorrilla!¿Es de verdad el sitio más barato o es lo que te quiere hacer creer su publicidad con sus ofertas?

        - “Puede ser...

        - “¡Fíjate en los yogures! Al final elegiste los de una marca “buena” ¿cómo sabes que lo son? ¿Trabajas o has trabajado en sus fábricas?¿Eres biólogo?".

         - "No, no. Yo soy “teleco”(**). En fin, no sé: se anuncian mucho por la tele. Y luego... son marcas muy caras “ergo” tienen que ser buenos sus productos, porque lo caro es lo mejor".

         - “Buen slogan publicitario “lo más caro es lo mejor”, creo que ya lo ha usado una marca de turrones. ¿y del coche qué me dices? Te lo trajo de Alemania un amigo de toda confianza, ¿eh? ¡Ay, la amistad (como la juventud) divino tesoro! Le veías siempre de “mono” (ellos dicen “buzo”), con un pañuelo lleno de grasa, hurgando los bajos de los coches: ¡Qué mecánico más bueno! ¡Cuánto tiene que saber de lo suyo! Otro tipo de publicidad, más artesanal, pero igualmente eficaz."

           Un ruido interrumpió la conversación:

           - “¡Papá!, ¡papá!¡Ven a ver esto!¡ hay una luz verde de la nevera!¡Y sale de uno de los yogures que trajiste, el que venía en un cacharro de barro!"


(*) Lo "deja", para los que no son de León.
(**) No, no es en homenaje a mi amigo Runner: que sea “teleco” es necesario para el capítulo sobre la selección adversa.

21 comentarios:

  1. Excelente post. Nada que objetar y sólo puntualizar que obviamente no vivimos ni nadie ha dicho que esto sea un mercado de competencia perfecta y cómo pasar por él siendo timado lo menos posible debería estar en el programa escolar, incluyendo protección contra las herramientas de marketing.

    Me alegra que hayas tocado el tema de las grandes superficies y su realidad. Además de ser teleco, soy hijo de trabajador que emprendió con el fruto de su trabajo (un comercio en mercado tradicional) y que sufrió la feroz competencia de las grandes superficies, por lo que estoy muy sensibilizado con el tema (este hecho vital sustenta mi opinión que ya he puesto en algún otro comentario sobre las posibilidades de crear capital sin tenerlo previamente).

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  2. La tesis salario consumo se resolvió en esta colonia imperial del modo mas retorcido y absurdo, puesto que había que dar salida a los excedentes de producción sin alterar el diferencial de plusvalía de los explotadores se compulsó a los asalariados a la asunción de créditos leoninos, el mecanismo era perfecto, dada la composición sociológica de la masa asalariada, (la adquisición de vivienda se vuelve algo perentorio si el sujeto quiere que dejar algo a sus herederos, condición sine quanon para ser atendido en sus necesidades escatológicas al llegar la decrepitud) los créditos fluyeron sin disminuir la tasa de plusvalía, en cuanto al consumo de gadgets, de eso se encargo una machacona y subliminal propaganda televisiva. El resultado es un nivel de endeudamiento privado descomunal en conjunción con otro público acorde, todo a mayor gloria de la oligarquía bancaria, autentica detentadora del poder. En un sistema atrapado entre la necesidad de consumo y crédito de crecimiento exponencial y la imposibilidad de realizar dicha necesidad por los obvios límites físicos, se hacen hipócritas llamadas al decrecimiento y al subconsumo. El sistema es capaz de pasar por encima de sus contradicciones sin romperla ni marcharla. Los mismos “libegales” que ayer cantaban las excelencia de la “mano invisible”, hoy se la cortan sin dudar, reclamando el salvamento por parte del denostado aparato estatal, para volver a reclamar a continuación recortes en gasto publico, que naturalmente solo paguen los asalatontos, a ellos….para que gravarles.. son tan pocos…

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  3. @zhu-de, los más liberales son los que piensan que habría que haber dejado caer a todos fuese lo doloroso que fuese, sin rescate alguno ni "too big to fail" que valga.

    lo más liberal es pensar que si la banca no reparte los beneficios con la sociedad, ¿por qué debe ésta compartir sus pérdidas? ese "seguro" implícito les ha permitido tomar riesgos insensatos que nos han llevado al punto actual.

    sin que sirva de precedente, voy a estar de acuerdo contigo en que el salvamento estatal nunca debió producirse y menos para después recortar el gasto público.

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  4. Por supùesto, amigo dmc, (lo de amigo, en el sentido mas Jhonwaynesco del termino, por supuesto) pero como ya dedujo Mao, la burguesia posee una innata capacidad de influir en las decisiones politicas, el sueño de un "mercado" neutral e inmaculado forma parte de las pesadillas de todo este orden absurdo y anarquico, la oligarquia JAMAS juega limpio, si le van bien las cosas, trata de tumbar al estado, si le van mal trata de saquearlo en su beneficio. Por eso yo pienso que la unica forma de evitarlo es...destruirla, a la oligarquia y a su hija fulana la burguesia, fuera clases y mercado, excepto el de las lechugas. Cualquier otro planteamiento es idealista... o interesado.

    Saludos.

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  5. Recuerdo hace años, hablando con un amigo físico cubano que estudió en Moscú, me comentaba que en la introducción de un manual de mecánica cuántica decía algo por el estilo de lo siguiente: "Ya el camarada Lenin había mostrado que el materialismo histórico implicaba la existencia de una función de probabilidad de cuadrado integrable". Leyendo al camarada Zhu-De, no sé por qué, me acuerdo de esta anécdota. Dicho sea esto con todo el cariño y simpatía.

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  6. Antonio, si me estas llamando estalinista y piensas que eso es para mi un insulto, vas dado, me considero estalinista y a mucha honra, cuando defendamos los interese del pueblo lo mismo que la oligarquia defiende los suyos, habremos dado un gran paso para la superacion de este sistema asesino, mientras tanto las ironias sobran, y ya que te gustan las frases, ahi va otra:

    "el poder esta en la punta de los fusiles"+
    Mao Zedong

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  7. Ya que estais con frases, pondre una a ver si adivinais de quien es:

    "Miren mi corte de pelo. ¡Estoy listo para la guerra!".


    Y respecto al blog, gracioso, aunque el tema de las marcas puede generar cierta confianza a la serie de comprarlas. No es lo mismo una bebida de cola que una super-coco-cola.

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  8. Zhu-De: No, chico, yo no hilaba tan fino (¿una cita sobre las inverosímiles virtudes de Lenin para la mecánica cuántica quiere decir que te estoy llamando estalinista?). Te equivocas en una cosa: cariño y simpatía ciertamente siento por ti, no es una ironía. Es más, después de tu último comentario me pareces entrañable.

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  9. @zhu-de, veo que ni siquiera llegas a conocer a tus ídolos pues, a pesar de definirte "stalinista a mucha honra" pareces confundir al autor de esa frase de la punta del fusil, que es de tu admirado stalin.

    supongo que la que querías decir de Mao es esta otra: "es perjudicial leer demasiados libros", que también la debes seguir a pie juntillas.

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  10. dmc, no me des consejos que se equivocarme solo. La frase en cuestion es: "Todos los comunistas tienen que comprender una verdad: "El poder esta en la punta del fusil"

    "Problemas de la guerra y la estrategia" (6 de noviembre de 1938) Obras escogidas tomo II

    El libro rojo Instutito de lenguas extranjeras, Pekin 1976

    Es lo que tiene trabajar con ediciones originales. Ah y lo de suplir falta de conocimiento con sarcasmo esta muy visto ya.

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  11. Joder, Edu, la frase "Miren mi corte de pelo. ¡Estoy listo para la guerra!" es de Mourinho.

    Y ya que hablamos de fútbol, propongo a Agus que nos deleite con algún episodio de Citizen K relacionado con el deporte rey, que ahí también hay mucho que contar

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  12. efectivamente, zhu-de, ya has dejado claro cómo te equivocas solito.

    aunque seguramente en la cita tengas razón, ya que como se ve no lees demasiados libros pero sí unos pocos muchas veces.

    la cita de Stalin es algo así como "el único poder real viene de un largo rifle", ligeramente distinta pero de igual significado. no puedo decirte quién la dijo antes, pero tampoco es relevante pues ambos genios de la planificación central compartían la misma visión del poder y, además, seguramente habrá cientos de versiones anteriores, ya que el tema no es, digamos demasiado original entre los totalitaristas y dictadores de cualquier pelaje.

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  13. "totalitaristas y dictadores"

    Me volvere "democrata" cuando vea actuar a alguna guerrilla "democrata", claro que a vosotros los "democratas" preferis que os regalen las "democracias", aunque para ello tengais que votar la guia telefonica, ¿verdad?

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  14. Oye, esperada a seguir a que vaya por palomitas. Además, dos conversaciones cruzadas, una sobre citas futbolísticas y otras sobre la justificación de la violencia (con y sin democracia). Ah, ahora lo entiendo: seguís las etiquetas que apostrofan el post...

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  15. Hombre Antonio, supongo que la imagen del Aurora disparando contra el Palacion de Invierno no va de coña ¿no? ¿o acaso los bocheviques hicieron un referendum para decidir si asaltaban el palacio?

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  16. Ése, Zhu-De, es un tema interesante, porque un día u otro se planteará. ¿Dónde comienza el uso legítimo de la violencia? Se lo dejo al Comandante (soy así de cabrito).

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  17. difícil decisión... morir por colapso capitalista o morir a manos de un proceso stalinista de gran purga... me quedo con lo primero pues con los fallos del sistema igual salgo vivo mientras que la perfección del camarada zhu-de no deja lugar a fallos.

    lo triste es que el problema no se va a resolver con la confrontación, lo que hace falta son otras cosas(*) para la que no parecen haber ganas.

    lo siento por la discusión, intentaré no enzarzarme en off-topics más.

    (*)colaboración, cooperación, concordia

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  18. Dos aclaraciones: primero el post explica un fallo de mercado "clásico", es decir contenido en todos los manuales de Economía Política o de Hacienda Pública que estudian la economía de mercado. El objetivo de estos post es "ir minando la moral" de los defensores de la economía de mercado.
    Segundo: sin tener nada que ver con este post (aunque sí con la ideología del blog) se desatan otra serie de temas que giran básicamente en torno a las "técnicas" para conseguir un cambio de sistema si éste no nos gusta: aquí hay dos vías: una reformista y otra revolucionaria. Por razones que iré explicando me inclino por la segunda (la vía revolucionaria),entre ellas es argumento relevante ver lo que ha sucedido a lo largo de la historia. Revolución y violencia no son sinónimos, aunque es claro que procesos revolucionarios normalmente comportan violencia: el origen de la monarquía constitucional inglesa y el de la república francesa, costaron sendas cabezas reales. Pero eso es para hablarlo largo y tendido (y razonadamente).
    Y finalmente una frase y reflexión histórica (alabo el nivel intelectual y cultural de los participantes en las discusiones): "La revolución es una opinión que ha descubierto las bayonetas" es una máxima de Napoleón recogida por Honoré de Balzac. Desmontar la obra de Napoleón en cuanto a ordenamiento jurídico y organización del estado, supondría retroceder trescientos años.

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  19. no soy partidario de ningún tipo de violencia y creo que a partir de ella no encontraremos el sistema sostenible que parece que estamos buscando sino otro con nuevas tensiones y nuevos grupos queriendo nuevamente (valga la redundancia) desmontarlo.

    creo que hay que buscar una transición basada en economía ecológica y nuevos valores por encima de establecimiento de sistemas con etiquetas de cualquier tipo.

    lo queramos o no, ante un contexto de escasez de recursos, la inicitiva privada tomará gran peso, llámase trapicheo en un sistema comunista o empresas/cooperativas/agrupaciones privadas.

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  20. Yo también soy partidario de los cambios por revolución, es decir, "disruptive change", innovación rompedora de esquemas, nada que ver con los fusiles, salvo para ponerse a salvo de los que nos quieren pasar po encima a bayoneta calada (yo pensé que ya no quedaban de esos, pero ¡en fin!, parece que en el mundo tiene que haber de todo).

    Respecto del tema del post (y también pido disculpas por dejarme llevar por asuntos tangenciales), no mina mi fe en el mercado. La información es incompleta en cualquier tipo transacción(incluido por ejemplo éste blog), independientemente del sistema económico que se proponga.

    Más esencial, y relacionado con los ejemplos de éste post, es la cuestión del reparto de fuerzas de los distintos agentes en un mercado cualquiera (por ejemplo el poder que tiene Telefónica para imponernos sus condiciones de servicio), te lo propongo como tema para un día que te apetezca y tengas tiempo (te sugiero que leas literatura sobre el esquema de las 5 fuerzas de Porter)

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  21. Hablando de Carrefour, de marketing y de hipocresía (tres conceptos tristemente relacionados, incluso en combinaciones de dos), ¿por qué no un "post" sobre la campaña de las bolsas de plástico?

    Resulta que muchas personas con las que comenté el suceso en su día defendían la patraña.

    Y yo replicaba diciendo: veamos muy señores míos, en mi casa de toda la vida las bolsas de la compra se aprovechan para la basura, dado que las "especiales" hay que pagarlas a parte. Del mismo modo que en mi casa, me parece ver cuando me fijo en los contenedores que también se hace en muchas otras, y ahí es cuando replico yo: ¿las bolsas que antes te pagaba Carrefour ahora las tendrás que pagar de tu bolsillo? ¿y todo para seguir contaminando lo mismo?. La cara de asombro de mis contertulios era evidente, más aun cuando les comentaba que había leído que la multinacional iba a ahorrar unos cuantos “milloncejos” de euros en costes operativos.

    Para echar más leña al fuego decía yo: si tanto les preocupase la ecología, no envasarían sus productos con cada vez más una auténtica “matrioska” de plásticos prescindibles con tal de “colocar” el “paquete” al primer “primo” que pase por el lineal. Como ejemplo los pastelitos “atómicos” de repostería industrial, que vienen embalados en su conjunto, envasados por grupos de unidades, con plastiquitos individuales para que no se resequen, y así un largo etcétera.

    En definitiva, otra paradoja más de este mundo en el que tenemos que vivir, y mientras tanto la masa esclava aplaudiendo la originalidad de las campañas de marketing que persuaden a que los costes de una gran multinacional sean soportados por tu bolsillo con tal de poder bajarte los precios y salir de nuevo en la “tele” diciéndote que “más barato ni en Canarias”.

    Un saludo a todos.

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